Hace una semana visité el colegio público El Manantial para comprobar de primera mano cómo se desenvolvían los monitores y los niños/as en la Escuela de Verano. Pude comprobar con gran satisfacción y con una sonrisa en la cara que los menores están muy bien atendidos y que se lo pasan en grande en el interior del centro educativo.
La Escuela de Verano es un servicio que prestamos para ayudar a los padres a que concilien su vida laboral con su vida familiar. Y es que, una vez que termina el curso escolar, muchos padres se ven en la problemática de no saber qué hacer con los hijos porque tanto él como ella trabajan. Los abuelos suelen ser el primer recurso al que se acude, siempre dispuestos a echar una mano en la casa. Pero no todas las familias pueden disponer de esta solución. Por eso, la Escuela de Verano es un servicio que siempre se debe poner a disposición de los padres.
En años anteriores hemos tenido problemas para poder dar cobertura a todas las solicitudes. Por eso este año hemos hecho un gran esfuerzo aumentando el número de monitoras para, en la medida de nuestras posibilidades, incluir al mayor número de niños y niñas posibles en la Escuela de Verano.
Después de la visita del otro día, puedo asegurar que el trabajo que allí dentro se realiza es del todo profesional y que las actividades que se llevan mantienen a los menores entretenidos de una manera lúdica y a la par educativa inculcando valores como el respeto por el medio ambiente o. la interculturalidad.
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